Eficacia de las terapias para la cefalea pospunción dural (PDPH) - NYSORA

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Eficacia de las terapias para la cefalea pospunción dural (CPPD)

11 de julio de 2024

Introducción

Dolor de cabeza pospunción dural (PDPH) es una complicación importante después de los procedimientos neuroaxiales, que afecta la calidad de vida del paciente. Thon et al. La reciente revisión de 2024 destaca avances clave en medidas profilácticas y terapéuticas para el PDPH.

¿Qué es el dolor de cabeza pospunción dural?

La CPPD se produce cuando el líquido cefalorraquídeo (LCR) se filtra a través de una punción en la duramadre, lo que provoca una disminución de la presión del LCR y un dolor de cabeza posterior.

Los síntomas típicos incluyen:

  • Dolor de cabeza pulsátil, exacerbado por la postura erguida.
  • Rigidez en el cuello.
  • Náuseas y vómitos.
  • Alteraciones visuales y auditivas.
  • Mareo.
  • Predominio

Tasas de incidencia:

  • 0.5% – 0.7% después de técnicas neuroaxiales.
  • Hasta el 80% después de una punción dural accidental durante la anestesia epidural (EDA).

Tratamientos conservadores

  • Reposo en cama: tradicionalmente recomendado, pero carece de pruebas sólidas de su eficacia.
  • Hidratación: Líquidos orales e intravenosos para aumentar la producción de líquido cefalorraquídeo (LCR).
  • Cafeína: Proporciona alivio sintomático a través de la vasoconstricción.

Tratamientos farmacológicos

  • Analgésicos: el paracetamol y los AINE son eficaces para el tratamiento del dolor.
  • Teofilina: un derivado de la xantina similar a la cafeína, útil para aliviar el dolor de cabeza.
  • Gabapentina: un anticonvulsivo que ha demostrado reducir los síntomas de PDPH.

Tratamientos invasivos

  • Parche sanguíneo epidural (PBE):
    • Procedimiento: Inyección de sangre del paciente en el espacio epidural para formar un coágulo y sellar la fuga de LCR.
    • Efectividad: Considerado el estándar de oro con altas tasas de éxito (hasta 90%).
    • Riesgos: Incluye punción dural repetida, dolor de espalda y complicaciones neurológicas.
  • Catéter intratecal:
    • Uso: Puede considerarse después de una punción dural accidental para reducir la aparición de CPPD.
    • Efectividad: Algunos estudios sugieren una menor necesidad de PBE y una menor incidencia de PDPH.
  • Inyecciones epidurales alternativas:
    • Hidroxietilalmidón (HES): asociado con tasas reducidas de PDPH, pero requiere más investigación para obtener evidencia concluyente.
    • Cosintropina: Se ha demostrado que estimula la producción de LCR, pero no se recomienda de forma rutinaria debido a su éxito limitado.

Nuevas terapias

  • Anestésicos locales terapéuticos (TLA):
    • Bloqueo del nervio occipital mayor (GONB): eficaz en el tratamiento del dolor de cabeza, pero requiere evidencia más sólida para el CPPD.
    • Bloqueo del ganglio esfenopalatino (SPGB): proporciona un alivio significativo del dolor y puede ser una alternativa útil cuando la PBE está contraindicada.
  • Lidocaína intranasal:
    • Aplicación: Uso de un dispositivo de atomización de mucosas (MAD) para un rápido alivio del dolor.
    • Efectividad: Previene la necesidad de PBE en algunos casos, brindando una alternativa no invasiva.

Directrices y recomendaciones

  • Medidas profilácticas: No se recomienda universalmente ninguna medida profiláctica específica.
  • Implementación de la PBE: No debe retrasarse en ausencia de contraindicaciones. Si los síntomas son ambiguos, se deben realizar más diagnósticos.
  • Seguimiento: Esencial para garantizar la atención adecuada al paciente y abordar cualquier queja residual crónica.

Perspectivas futuras

La investigación en curso es crucial para comprender mejor la fisiopatología del PDPH, lo que podría conducir a nuevos objetivos terapéuticos y mejorar la eficacia de los tratamientos existentes. Los catéteres intratecales y los anestésicos locales se muestran prometedores como posibles alternativas a los procedimientos invasivos.

Conclusión

El tratamiento del PDPH sigue siendo un desafío, pero continúa evolucionando con nuevas investigaciones. Si bien la PBE sigue siendo el tratamiento más eficaz, las terapias alternativas y una mejor comprensión de la afección podrían mejorar los resultados de los pacientes en el futuro.

Para obtener información más detallada, consulte el artículo completo en Opinión actual en anestesiología.

Thon JN, Weigand MA, Kranke P, Siegler BH. Eficacia de las terapias para la cefalea pospunción dural. Opinión actual Anestesiol. 2024;37(3):219-226

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